Otros destinos imprescindibles de Marruecos

Conocer Marruecos es descubrir mucho más que sus ciudades imperiales. Tras años explorando el país, estas son las paradas que recomiendo a quienes buscan rincones auténticos, naturaleza, cultura o relax en la playa.

Chefchaouen: la perla azul del Rif

Chefchaouen, o Chauen, es el destino más fotogénico de Marruecos, famoso por el azul infinito de su medina entre montañas. Lo esencial es dedicarle tiempo a perderse por sus callejones (¡el móvil no te servirá de mucho aquí!), subir al mirador de la mezquita española al atardecer y disfrutar el ambiente relajado. Perfecto para amantes de la fotografía y para vivir la calma marroquí lejos del bullicio.

  • Consejo personal: Lleva calzado cómodo para sus cuestas de piedra y prueba la tarta de queso local en alguna terraza con vistas a la medina.

Essaouira: costa, cultura y música

Esta ciudad amurallada en el Atlántico tiene una medina Patrimonio de la Humanidad, playas estupendas y ambiente de artistas. Es ideal para relajarse, disfrutar de mariscos frescos y recorrer su puerto lleno de color. Además, es el epicentro del festival de música Gnawa.

  • Para viajeros activos: Windsurf y kitesurf casi todo el año gracias a sus vientos constantes.

Ouarzazate y Aït Ben Haddou: la puerta al desierto y el cine

Ouarzazate es conocida como la “Puerta del Desierto” y Aït Ben Haddou es un ksar de adobe Patrimonio de la Humanidad que ha sido escenario de grandes películas. Recorrerlo al atardecer es una experiencia mágica. Desde aquí parten muchas excursiones a las dunas de Merzouga o Zagora.

  • Tip local: Vale mucho la pena visitar también alguna kasbah tradicional y, si tienes tiempo, continuar hacia el Valle del Draa.

Desiertos de Merzouga y Zagora

Ningún viaje completo a Marruecos está exento de pasar al menos una noche en el desierto, ya sea en las dunas doradas de Erg Chebbi (Merzouga) o el desierto de Zagora, más cercano a Marrakech. Excursiones en dromedario, atardeceres de película y cielos estrellados son el principal atractivo.

  • Recomendación personal: Si puedes, opta por un campamento bereber tradicional para vivir el Sahara de manera auténtica.

Norte desconocido: Tetuán, Asilah y Tánger

La costa norte sorprende por su fusión de estilos y herencia española. Tetuán enamora por su medina y aire poco turístico. Asilah seduce con arte urbano, murales y playas tranquilas, muy querida por quienes buscan ambiente más íntimo. Tánger es multicultural, literaria y siempre intrigante por su historia de espías y literatos.

  • Consejo de viajera: En verano, la costa norte se llena de marroquíes que viven fuera y es buen momento para mezclarse y aprender el verdadero ritmo local.

Sur: Valle de las Rosas, Gargantas del Todra y del Dadès

El gran sur ofrece naturaleza espectacular: el Valle de las Rosas cubierto de flores en primavera, las gargantas del Todra y del Dadès ideales para el senderismo y la escalada, pueblos bereberes auténticos y cielos infinitos.

Agadir y costa Atlántica

Agadir es moderna, con playas extensas y buen ambiente todo el año. Es el mejor destino si solo buscas relax y mar, pero la auténtica joya está más al sur, en pueblos como Taghazout, famosos por el surf y el ambiente bohemio internacional.

Otros destinos inesperados

  • Volubilis: Ruinas romanas espectaculares, ideal para amantes de la historia.

  • Azrou y el Atlas Medio: Bosques de cedros y oportunidad de ver monos en libertad.

  • Taroudant: Pequeña ciudad fortificada, llamada “la pequeña Marrakech”, con gran ambiente tradicional.

  • Dakhla: En el Sáhara occidental, para deportes acuáticos y naturaleza virgen.

Consejos generales para hispanohablantes

  • El español se entiende en muchas zonas del norte. Inglés y francés son mayoritarios en el sur y este.

  • En destinos menos turísticos, la hospitalidad es mayor y la experiencia más auténtica.

  • No dudes en usar el autobús, tren o taxis compartidos para moverte entre ciudades.

Marruecos tiene mucho más que ofrecer que sus ciudades más famosas. Cada destino aquí propuesto deja recuerdos indelebles y es perfecto para quienes buscan una experiencia profunda y personal, contada por alguien que ha vivido el país y sigue soñando con volver. ¡Buen viaje!

Un viaje por todo el país, Marruecos es la joya por descubrir

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